
un grito ahogado
se cuela por las ventanas
y trae a mi casa
una angustia de otros tiempos
de otra edades
de otros lugares y gentes.
Sé que en otra casa,
en esta o en otra noche,
tú también lo has oído.
Mitigar soledades... Pasear la vista por la caligrafía del ordenador y dejar que las palabras nos transporten. Mil miradas sobre mil mundos. En los submundos del mundo es donde hago yo mi casa.
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